El Coaching Deportivo es una herramienta valiosa e integral en el proceso de alcanzar un rendimiento óptimo en cualquier disciplina deportiva. Siempre que haya buena relación entre entrenador y atleta, un enfoque holístico en el desarrollo personal y un compromiso mutuo por alcanzar metas, los beneficios serán visibles tanto dentro como fuera del terreno de juego. No solo se trata de mejorar habilidades técnicas o físicas, sino también de trabajar en el desarrollo personal y emocional.

Ayuda a los atletas a Gestionar adecuadamente situaciones de presión y estrés, lo cual es especialmente importante en competencias de alto nivel.

A través de técnicas de visualización y control emocional, el coach puede preparar al atleta para enfrentar cualquier desafío con confianza y determinación.

El Coaching Deportivo es un proceso donde más allá de lo deportivo, el deportista deberá adentrarse en sus motivaciones o deseos para alcanzar los objetivos.

El coach deportivo deberá preguntarse el "qué, cómo y para qué" del cambio esperado que pueden llevar al deportista al plantearse todo lo comentado anteriormente. Es decir, cuando el coach le hace al deportista poner en duda todo lo que va haciendo hasta el momento presente en su carrera deportiva, el entrenador debe replanteárselo todo, desde sus métodos de entrenamientos y el camino para alcanzar los éxitos deseados.

Ésto se lleva a cabo, a través de un Plan de acción, así como las visualizaciones y afirmaciones, ya que será el camino para volver a planificar estrategias deportivas, para lograr las metas, sometiendo al Plan como al deportista a una evaluación constante.

ESTA PLANIFICACIÓN APORTARÁ LOS SIGUIENTES BENEFICIOS:

*Alcanzar metas y objetivos deportivos.

*Mejora la motivación y el autoestima.

*Tomar consciencia de las fortalezas y debilidades.

*Asumir responsabilidades y el compromiso con el deporte/ equipo.

*Desarrollar el talento del deportista.

*Asentar las bases para poner en práctica el autoaprendizaje.

FASES DEL COACHING DEPORTIVO

Todo proceso de Coaching Deportivo sigue una estructura predefinida y se compone de CUATRO FASES. El punto de partida es la " TOMA DE CONSCIENCIA"; más tarde hay que superar las etapas de "QUERER" y la de "SABER", para acabar en la definitiva de "ACTUAR".

PRIMERA FASE DEL COACHING DEPORTIVO: TOMA DE CONSCIENCIA.

El deportista debe saber que hay muchas formas de lograr un objetivo. Por eso el coach, deberá ayudarle a abrir su mente, visualizar sus metas y ubicar a donde quiere llegar. Esto es importante porque, si no hay claridad de ideas sobre el lugar al que se dirige, será imposible alcanzar el éxito.

En este punto del proceso de aprendizaje se podrían aplicar las técnicas, por ejemplo, las técnicas del por qué,el cómo y el para qué. Profundizando en esa dirección se inicia un PROCESO DE CONCIENCIACIÓN para alcanzar los objetivos.

SEGUNDA FASE DEL COACHING DEPORTIVO: QUERER.

El deportista debe tener el deseo, una vez que ha localizado su objetivo y lo ha analizado, de alcanzarlo. Sin la voluntad de que sucede un cambio que lo haga alcanzar sus metas, ésto no sucederá.

Aquí habría que aplicar diferentes técnicas de coaching deportivo, como por ejemplo, trabajar sobre las CREENCIAS, para lograr que la motivación del deportista sea la máxima

TERCERA FASE DEL COACHING DEPORTIVO: SABER.

Superada la fase del querer, es necesario seguir en el camino del conocimiento. Hay que CONOCER, ENTENDER y SABER como aplicar las TÉCNICAS necesarias, como la VISUALIZACIÓN y o las AFIRMACIONES, para alcanzar los objetivos.

Por lo tanto, se debe continuar trabajando para lograr los cambios deseados, ejecutarlos de manera que sean FIRMES y PERSISTENTES, asegurando el éxito en el tiempo y de la mano del coach deportivo.

CUARTA FASE DEL COACHING DEPORTIVO: ACTUAR.

Este es el último y por supuesto el más importante de todos los procesos del coaching deportivo. Sino se culmina el proceso con un BUEN DESARROLLO de la ACTUACIÓN, de nada habrá servido todo el trabajo previo. Hay que saber continuar con el objetivo en mente y luchando por el deseo que mueve al deportista.

El coach podría, por ejemplo, utilizar técnicas propias de esta DISCIPLINA, como el trabajo de los HÁBITOS y MEJORA del PLAN de ACCIÓN, para que el deportista culmine todo el proceso, alcanzando sus metas definidas en el inicio del trabajo de coaching.