Por medio de un comunicado Amnistía Internacional exige el cese inmediato de la violencia estatal en Jujuy. El comunicado menciona como el gobierno debe cesar de inmediato el uso excesivo de la fuerza contra quienes ejercen su derecho a la protesta pacífica, que ha dejado como consecuencia a cientos de personas heridas en los últimos días.

Desde que iniciaron protestas en Jujuy, provincia ubicada en el norte de Argentina, contra una reforma constitucional y los reclamos salariales de docentes, la policía provincial ha respondido con uso de la fuerza execesivo, empleando gases lacrimógenos, balas de goma y violencia física contra la población, especialmente contra personas Indígenas y campesinas. Lo anterior ha sido documentado por algunos medios locales y varias publicaciones en redes sociales como Twitter y TikTok. Las publicaciones muestran enfrentamientos entre la policía y la población, así como diversos testimonios sobre lo que las personas tratán de defender para que su calidad de vida y derechos no sean vulnerados

En palabras de Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional: "El gobierno de la provincia de Jujuy le está dando la espalda a quienes ejercen su derecho a protestar contra la reforma constitucional, enviando a las fuerzas del orden a resolver con represión un problema que debe solucionarse con diálogo. La seguridad de la población no se puede garantizar violando los derechos humanos".

Todo inicio el 15 de junio, cuando la Convención Constituyente aprobó una reforma constitucional de manera exprés, sin dar ningún espacio para la participación pública y la consulta de expertos en el tema. Un proceso que debió durar al menos 90 días para su debate fue resuelto en apenas tres semanas, y sin dar a conocer el texto final sino hasta el día de su sanción.

Después de la aprobación exprés, en varios puntos de la provincia de Jujuy se iniciaron movilizaciones de rechazo a la reforma. Fue cuando también se dio incio a la represión de dichas movilizaciones, las cuales ya han dejado cientos de personas heridas, incluyendo un joven de 17 años que perdió un ojo tras los disparos de balines de goma por parte de la fuerza policial.

Hasta ahora, y en base a información oficial, más de 60 personas han sido detenidas, la mayoría de ellas bajo la figura penal de "resistencia a la autoridad", utilizada usualmente para limitar movilizaciones y marchas sociales, además de el derecho constitucional que tienen todos los ciudadanos a hacer peticiones ante las autoridades. 

Esperamos que la exigencia que hace Aministía Internacional marque un cese a la represión y se abra el diálogo para que se generen acuerdos entre la población y el gobierno